Reseñado por Bitterblink
Pierce Brown (nacido en 1988) es un autor estadounidense de ciencia ficción y fantasía, graduado en Ciencias Políticas y Economía. Su saga Amanecer Rojo —con Hijo Dorado como segundo volumen— le valió el premio Goodreads Best New Novelist 2014, y el de Best Science Fiction Novel 2015 por esta misma obra
Sinopsis
Han pasado dos años desde los sangrientos juegos del Instituto. Darrow de Lykos, un Rojo nacido para trabajar en las entrañas de Marte, continúa su peligrosa vida como infiltrado entre los Dorados, la casta dominante de la Sociedad, como Darrow au Andrómeda.
Tras sobrevivir a las brutales pruebas de iniciación, ahora sirve como protegido de Nero au Augustus, uno de los más poderosos Arcontes del sistema solar (el Archigobernador de Marte), mientras su lealtad se balancea entre el odio por la tiranía dorada y las relaciones personales que ha forjado en ese mismo mundo.
Tras el saboteo de su paso por la academia a manos de la Soberana con la ayuda de los Bellona, Darrow tendrá que ser testigo de su caída en desgracia, como lo pierde absolutamente todo, desde su posición, a su protector que vende su contrato o incluso a Mustang que se convierte en la pareja de Casio. Es entonces cuando contactado por Harmony es presionado para activar un terrible plan de los hijos de Ares.
Sin embargo el plan terminará derivando en el que el propio Darrow ha diseñado con un objetivo: que la llama de la guerra civil se extienda por el sistema solar. Así con sus antiguos y algunos nuevos aliados Darrow iniciará una guerra que culminará con la lluvia de hierro sobre Marte.
Aliado con miembros de otros colores (mención especial a Ragnar, un Sucio Obsidiano) Darrow tendrá que buscar el equilibrio en su relación fictidia con Mustang y los demás Dorados a los que odia y teme pero también quiere y la verdad que no puede revelar. Lo que no sabe es si estas «amistades» podrán soportar la verdad.
Opinión Personal
Esta novela es una continuación directa de Amanecer Rojo, así que no tiene caso leerla si no has leído la primera. Dicho esto escogí leer la segunda parte inmediatamente porque quería ver si realmente la serie continuaba después de una primera novela prácticamente autoconclusiva. Y vaya si lo hace. Volvemos a un Darrow que es más humano cuando pierde que cuando gana, y otra vez lo restriegan por el barro. El inicio se me hizo un poco cuesta arriba hasta el primer punto de inflexión (que no voy a desvelar), donde Darrow vuelve a reunir a su viejo grupo de amigos del instituto. En general una escena sin Sevro es una escena perdida. En este libro entenderemos más a Sevro que no es un alivio cómico (a veces lo es) sino que se nos sigue presentando como un capullo que a la vez es el más leal de los amigos. No puede gustarme más, pese a que sea un «bromance» un poco forzado desde el principio.
Me gusta que en este libro se indague mucho más en los otros colores, aunque solo sea en azules y obsidianos y que empiece a tener aliados de estos colores. El personaje de Ragnar Volarus un obsidiano Sucio que es rescatado por casualidad cuando iba a ser vendido otra vez como esclavo y que viene de pelear en el coliseo frente a bestias mutantes creadas por los tallistas es un personajazo, que tiene algunos de los mejores parlamentos de todo el libro, lástima no tener más interacción con él. Es cierto que el protagonismo de estos secundarios está muy limitado por la presencia de los dorados aliados y enemigos de Darrow, considero que es una lástima pero lo entiendo ya que son los que dominan la sociedad.
Al igual que en el primer libro estaremos constantemente con el corazón en un puño no sabiendo lo que va a pasar, si los planes van a funcionar o no (que los planes no funcionen es lo que hace humano a Darrow, no es infalible, es bueno pero no perfecto). Y luego la traición que siempre sobrevuela a Darrow. Da igual cuantas veces le digan «no te fies de X que es un *********» pues nada, Darrow dice que todo el mundo tiene derecho a cambiar si se le da la oportunidad. Esta ingenuidad le pasa factura varias veces en el libro con distintos niveles de gravedad pero siempre son graves. Quizá es lo que menos realista me pareció del libro, que Darrow está lleno de odio pero va de apostol del amor… no quiero decir que no me guste, es un defecto del personaje que le hace humano sin duda, sin él sería un Gary Stu de manual.
En este libro aun más que en el primero estaremos preocupados por nuestros secundarios «preferidos» ya que a Brown no le tiembla la pluma a la hora de asesinarlos de las maneras mas ignominiosas. Es verdad que hay pocos de estos secundarios que tengan algo más que «nombre» (la mitad de los Aulladores solo tienen apodos ridículos y apenas tienen protagonismo) pero en general tendremos siempre la sensación de que cualquiera puede caer a) muerto o b) traicionando a Darrow.
Insisto que en este libro aun más que en el primero tendremos varios momentos de gran estrés emocional, del tipo «no quiero saber lo que va a pasar porque va a ser muy malo, pero no puedo dejar de leer». Encima el muy ****** de Brown juega con el lector con todo tipo de cosas, incluyendo una larga y terrible escena donde no nos revela el contenido de una caja pero todo el que ha visto Seven sabe que solo puede ser una cabeza cortada pero… ¿De quién? aaaaaargh, se tira hojas sin desvelarlo y casi me hace tirar el libro por el balcón.
Me gusta que la relación con Mustang que es una de las más complejas que he visto en un libro de fantasía / ciencia ficción evolucione. Es un amor complejo y lleno de culpas y medias verdades, tan fuerte y a la vez tan frágil. Le doy un 10 al autor por la elegancia de la única escena que en otros libros llaman spicy y que podría haber sido pornográfica fácilmente (que considero como poco de mal gusto) como en algunos libros de romantasy.
Un punto que no me gusta es que aun en este segundo libro teniendo tantos y tan buenos secundarios nunca veamos la historia desde otro punto de vista. Es una verdadera lástima que solo tengamos la voz de Darrow aunque me consta que esto cambia en los siguientes libros.
Me gusta la verdad que los Dorados expliquen su punto filosófico de por qué la sociedad es buena, y debo decir que no les falta razón en algunos puntos que expresan, sin embargo es la hipocresía con la que lo manejan la que los desmonta, porque sobre el papel es cierto que la libertad individual no lleva a la mejora de la vida del ser humano sino a la búsqueda del placer por el placer.
Para terminar comentar que el final en este caso no es algo cerradito como el primer libro, en este caso nos deja en un cliffhanger super dramático que está íntimamente ligado a ir corriendo a leer el tercer libro. Que si, que lo leeré pero me cabrea que haga esto el autor cuando no hay necesidad.
En general una buena segunda parte, donde ampliamos horizontes y profundizamos en personajes y conocemos personajes nuevos. Alguno se queja de demasiada batallita pero a mi no me ha parecido excesivo en la parte de acción y sí muy bien escrito.
Calificación: Bueno
Lo Mejor: Acción bien descrita, grandes secundarios
Lo Peor: Un unico PoV, final con cliffhanger
Lo Releería: Si, en general es un buen libro
Lo Recomiendo: Si te gustó el primero no te decepcionará el segundo
Si quieres comprar el libro y apoyar al blog
Bitterblink
Un libro para esta noche 