El Estado Electrico – Simon Stålenhag


Reseñado por Bitterblink

Simon Stalenhag es un artista polifacético, músico, pintor, escritor y diseñador gráfico Sueco. Sus obras se encuadran en lo que se llama la corriente «retro-futurista», basadas en paisajes nostálgicos de la Suecia rural aderezados con máquinas o robots futuristas integrados en esas imágenes pretendidamente clásicas.

Sus pinturas fueron la inspiración para la serie de Amazon Prime video Historias del bucle. De la misma manera, este libro, llamemosle cómic aunque realmente es más bien un libro ilustrado, ha inspirado una película recien estrenada en Netflix con el mismo título Estado Electrico, aunque los vínculos entre este cómic y la película son más bien estéticos, protagonizada por Chris Pratt y Millie Bobby Brown.

Sinopsis

Michelle y Skip viajan hacia la costa del pacífico atravesando EEUU, con apenas dinero y habiendo conseguido un coche casi de chiripa. Recorren las llanuras llenas de chatarra y de naves de desembarco oxidadas junto a las que pastan rebaños de ganado.

Durante el viaje Michelle va rememorando cómo ha llegado el mundo a este estado, como una tecnología de pilotaje de drones utilizada en la guerra se convirtió en la «experiencia virtual definitiva». Esta tecnología (el neuronizador) fue la que acabó con su madre, adicta a las drogas que le permitieron desligarse de la tecnología tras la guerra, y poco a poco según se va extendiendo su uso civil va acabando primero con la madre adoptiva y luego con el padre de Michelle.

Rememorará su infancia, su primer amor, Amanda, y toda la incomprensión y aversión que ella siente hacia los que se sumergen en el mundo virtual. Máxime porque la propia Michelle no es capaz de usar esta tecnología para «escapar» debido a una malformación de los ojos, ella esta «atrapada» en la realidad.

Amanda y Skip evitan controles y poco a poco van avanzando hacia un destino que durante gran parte del libro no sabemos cual es. Asímismo, aunque al principio el libro sugiere que Skip es un niño (lo tratan como a tal) pronto en las ilustraciones iremos viendo que se trata de un robot con aspecto infantil que no habla pero que reacciona para todos los efectos como un niño juguetón basicamente aburrido por el viaje. Tenemos pues que encontrar respuestas a las preguntas ¿qué o quién es Skip y hacia donde se dirigen?.

Opinión personal

La verdad es que este libro no es más que una excusa para que Simon haga sus «cuadros». Los cuadros son sobrecogedores, melancólicos y a la vez tienen una fuerza espectacular. El libro en si es precioso, con su formato cuadrado, digno de estar en la sala de estar de cualquiera. Normal que lleve un tiempo agotado en Amazon en España.

Cada imagen podría inspirar una historia propia (como ocurre con Historias del Bucle) pero aquí nos va mandando mensajes de melancolía y abandono, de como la tecnología nos ha cambiado y no precisamente para bien. De como la gente no desea más que vivir en una realidad que controla en vez de en la sucia realidad que nos ha tocado vivir.

Es una pregunta filosófica que intenta responder este libro. ¿Qué prefieres? ¿Una realidad imperfecta y dolorosa o un mundo de mentira perfecto y totalmente maravilloso en el que puedes vivir? Pues el autor te viene a decir que si pudieramos elegir, incluso sabiendo la terribles consecuencias que tiene «engancharse» a ese mundo virtual, la mayor parte de la gente elegiría el perfecto mundo sedante, igual que hay gente que se adormece con los realities sean sobre sexo, sobre subastas, reformas etc. Sin embargo el autor nos propone algo taaan bueno que no sea de unas pocas personas sino que la mayor parte de la gente elija no vivir en la realidad.

El autor además nos va planteando no solo hasta qué punto se abandonan los que utilizan en neuronizador, no se lavan, no se visten, algunos se conectan incluso a sondas para no comer ni tener que parar para ir al baño, pero es que además produce efectos terribles sobre el cuerpo (los hijos de los primeros pilotos de drones nacieron todos muertos) como por ejemplo la galactorrea en los hombres (las mamas producen una especie de «leche materna»). Y aun así todos están enganchados.

Y luego está la propia naturaleza de skip. Aquí entramos en la parte quizá más de ciencia ficción especulativa. Hablaremos de la ética de lo que es el ser humano etc, pero no os puedo contar mucho más sin hacer spoilers.

Lo mágico de este libro es que nos cuenta, nos describe cosas difíciles de describir en pocas palabras pero nos brinda a cambio unas imágenes realmente sobrecogedoras. Los monstruos de metal que son marañas de cables con cientos de «personas» conectadas a los neuronizadores avanzando como rebaños entre la niebla son imágenes que te taladran el cerebro.

En definitiva una «road movie» siniestra, dramática, muy melancólica, de una duración suficiente para encariñarnos con los personajes. Una maravilla gráfica y un libro precioso tanto por lo que muestra como por lo que cuenta.

Calificación: Muy bueno

Lo Mejor: Debería ser evidente, las increíbles ilustraciones que nos llevan a esta realidad decadente, las cuestiones filosóficas, la ternura del amor entre hermanos que solo se tienen el uno al otro.

Lo Peor: Un tanto corto, es complejo de leer al mezclar los flashbacks sin mucho orden o sentido

Lo releería: Si, y compraré una copia física para tener en mi estantería, es precioso

Lo recomiendo: Como objeto es maravilloso, como libro creo que hace un gran trabajo al describir la intrahistoria de estos melancólicos cuadros, así que si, si te gusta el género de la ciencia ficción postapocaliptica lo recomiendo aunque no sea un libro de aventuras

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