Reseñado por 0017
Ficha técnica
Título original:
Año:
Director: Simon Curtis (PELÍCULAS)
Guión: Alexi Kaye Campbell
Música: Martin Phipps, Hans Zimmer
Fotografía: Ross Emery
Reparto
- Helen Mirren
- Ryan Reynolds
- Daniel Brühl
- Katie Holmes
- Tatiana Maslany
- Jonathan Pryce
La historia basada en hechos reales de Maria Altman, una exiliada austríaca en USA que de joven tuvo que escapar de Austria ante el ascenso del partido nazi y la escalada de violencia y odio frente a la comunidad judía del país, en los momentos previos a la segunda guerra mundial. La familia de Maria pertenecía a la burguesía de Viena, y el gran pintor Gustav Klimt retrató a su tía Adele Bloch-Bauer inmortalizándola en el icónico retrato posteriormente conocido como “La dama de oro”. Pero tras la llegada de los nazis a la ciudad, todos los bienes de la familia Altman son requisados, y entre ellos la fabulosa pintura que, años después, pasa a formar parte del patrimonio del gobierno austríaco. Más de cincuenta años después, Maria Altman se pone en contacto con Randol Schoenberg, un joven abogado hijo de una gran amiga suya, también descendiente de austríacos exiliados, para exponerle el caso de la hipotética reclamación de la pintura a partir de la recién estrenada política de Austria de devolver objetos de arte robados a los judíos. La que se antoja a priori una tarea imposible, por haberse convertido el Retrato de Adele en un símbolo nacional austríaco, se irá convirtiendo en una lucha personal a lo largo de los años para que Maria se enfrente a su pasado a la vez que, mediante oportunos flashbacks, nos sumergimos en los convulsos años previos a la segunda guerra mundial, y al auténtico drama familiar que supuso para Maria la huida de su país de origen.
Agradable de ver y bastante descriptiva en la historia real de la batalla por la recuperación de la pintura que da nombre a la película, no sabemos si realmente el sobrenombre de “La dama de oro” se refiere a la persona retratada o al personaje que vivazmente interpreta Helen Mirren. Protagonista de un biopic a los que la veterana actriz está acostumbrada, Mirren se mueve con fresca desenvoltura para dar vida a una cascarrabias entrañable que esconde un dolor profundo motivado por un pasado triste y convulso. Con semejante fichaje para el papel principal la calidad de la cinta estaba asegurada, y ciertamente le da un empaque interpretativo de altura. Más arriesgado era la selección del guaperas Ryan Reynolds para la contrarréplica masculina, y sin embargo sale airoso de un reto que incluía dar vida a un abogado tímido y algo torpe, sin experiencia y con una carga familiar detrás que le da un extra de presión a la ardua tarea a la que se encomienda la extraña pareja. Y ocurre lo impensable, que era el acabarnos creyendo a su inicialmente inexperto personaje, y ver en su interpretación una cierta evolución moral mientras una fijación por momentos obsesiva se va apoderando conforme va avanzando el caso.
Lo bueno de la cinta es que logra hacer que nos metamos en la historia conforme avanza la trama, y los oportunos flashbacks que nos retrotraen a la década de los años treinta están tan bien insertados que ayudan a que el ritmo no decaiga en ningún momento, intercalando el empaque dramático de la historia para recuperar un cuadro de tal magnitud (y el enfrentamiento burocrático con un gobierno como el de Austria, altivo y orgulloso), con el drama de tener que huir del país en los albores del desastre totalitario nazi. Y todo sin recrearse en dramatismos explícitos estilo “La lista de Schindler”, con la que se inició el subgénero del holocausto nazi y donde “La vida es bella” o “El pianista” nos mostraron lo que la historia se empeñó en ocultar durante décadas.
Junto con los actores principales encontramos secundarios que sobrellevan la trama con gran calidad. Un Daniel Brühl que cada vez está más integrado en Hollywood, una Katie Holmes que quizás sea lo peor de la cinta (menos mal que su presencia es reducida) e, incluso, un Jonathan Price semi oculto que da gusto descubrir para el espectador avizor. Y, sobre todo, los exteriores rodados en el centro de Viena, ciudad que se convierte en una protagonista más y que hace un escenario inmejorable para el trasfondo de la historia (y que contrasta con la soleada California). Por todo ello, sin ser uno de los grandes biopics de la historia (no es que se a mi género favorito, todo hay que decirlo, por pecar de aburrido la mayoría de las veces), sí que resulta fácil de ver y por ello, recomendable esta “Dama de Oro”, por la lección de historia y de arte que supone.
Calificación: Buena
Lo Mejor: Viena como trasfondo de la historia; el ritmo creado a través de flashbacks.
Lo Peor: Katie Holmes
La vería de nuevo: Sí
La Recomiendo: Sí
Ficha en IMDB: http://www.imdb.com/title/tt2404425/
Tráiler en You Tube (español):