Reseñado por Bitterblink
Ann Leckie comenzó a escribir esta trilogía en 2013 y con esta novela ganó el prestigioso premio Locus. Es la secuela directa de Justicia Auxiliar así que no recomiendo intentar leer este libro sin haber leído el anterior. Sin embargo creo que si has leído el primero y te ha gustado es imprescindible darle una oportunidad a este porque explica muchísimas cosas que se deja en el tintero en el primer libro.
Sinopsis
Breq, tras su pasada aventura es nombrada «Capitana de la Flota» y enviada a defender el sistema Athoek en una nave de clase Misericordia cuyo primer Teniente será su inseparable Seirvander y al que se incorporará la teniente novata Tisarwat.
En Athoek, Breq tendrá la oportunidad de encontrarse con la hermana de la difunta Awn, Basnaaid ante la cual carga con la culpa y la vergüenza de lo que le ocurrió a Awn. También conoce a la Capitana Hetnys, cuya nave, de clase espada, Espada de Atagaris, es la responsable de defender el sistema, así como a la gobernadora y a una de las principales ciudadanas de Athoek que se dedica a la producción de Té, quizá el principal articulo de lujo de Radch.
Pronto será evidente que las condiciones de la estación son como poco extrañas, y que algo ocurre respecto a las que la estacion y las propias Radchai consideran «no ciudadanas» incivilizadas de distintas etnias y deportadas de otros sistemas.
Breq tendrá que abrirse paso entre las intrigas de la estación mientas que la amenaza de la guerra civil en el imperio Radch y de las alienígenas Presgeres se cierne sobre ellos.
Opinión Personal
Considero que los libros de Ann Leckie son de esos «fundacionales» para la ciencia ficción moderna. Igual que «La Vieja Guardia», «El problema de los tres cuerpos», «Somos legión» o «Los diarios de Matabot». Creo que son libros que hay que leer si te gusta la ciencia ficción porque influyen tanto y en tantos autores, que resultan imprescindibles. Es cierto que aunque este libro recibió el premio Locus, lo considero un poco menos enganchón que el primero, aun así no pude soltarlo hasta que lo terminé.
Destacar de nuevo el particular estilo de Ann Leckie donde el género no es fácil de determinar ya que en el idioma Radchai solo existe el género femenino y todos los personajes se identificarán con nombres neutros o la traducción (correcta) de «ciudadana». Si sabemos del libro anterior que en otros idiomas de este universo existe el género y allí identifican a Seirvander como «él» y a Breq como «ella». En este caso pocos personajes más se identificarán por su género (solo otros 2 en toda la novela) por tanto da que pensar que el resto de personajes con los que interaccionan son femeninos. Pero quizá lo más importante es que el libro te demuestra que en la cultura de estos personajes el género no tiene ninguna importancia ya que la tecnología ha avanzado lo suficiente como para que cualquiera pueda tener hijos, con o sin pareja (clones). A mi me gusta este diseño de la novela porque realmente te hace pensar en un imperio extraterrestre futurista, mucho más que la tecnología.
Además aqui se profundizará en la naturaleza de los Auxiliares, bastante horrible la verdad, ya que yo pensaba que era cadáveres animados o clones o robots creados al efecto y la realidad es mucho, mucho, mucho peor.
Me sorprende lo adictiva que es la novela cuando la mayor parte de los enfrentamientos son verbales y donde casi hay más filosofia que otra cosa. Hay más «acción» bebiendo té que empuñando armas o pilotando naves. La obsesión por la vajilla o por el té o por las canciones te proporcionan una visión e una sociedad quizás mayoritariamente femenina.
Maneja conceptos complicados y polémicos con soltura, como la naturaleza de la justicia, que no es algo absoluto y que hay que enfrentarse a las consecuencias de los propios actos. Para sorpresa de nadie, Breq que perdió su humanidad es más humana a veces que los humanos.
Hay veces, (bastantes) donde las decisiones o los «caprichos» de Breq nos dejarán fuera de juego. Sobre todo cuando manipula a la teniente Tisarwat, pero poco a poco ves que lo hace por su «bien».
Es deliberadamente confuso cuando nos intenta explicar esa conciencia omnipresente que tiene Breq, que está a la vez hablando con el personaje A, y a la vez «espiando» lo que hace el personaje B y viendo como las Amaat hacen sus tareas en la nave.
Aconsejo también leer algún wiki sobre el libro para entender que son las Bos, las Amaats, que es una decuria, las clases de las naves etc… aclara bastante la confusión aunque la autora nos lo va explicando con cuentagotas te pierdes algunas cosas al no saberlas de antemano.
En general me parece un muy buen libro, que mantiene la originalidad superlativa de un imperio galáctico dificil de describir en pocas palabas y a la vez nos lleva a un misterio que Breq tiene que descubrir y consigue engancharte para que te mantengas en vilo hasta el final de la novela (dejando cabos sueltos para la tercera parte).
Calificación: Muy bueno
Lo mejor: Sigue manteniendo la originalidad y nos explica algunas cosas, buen misterio que se va desvelando poco a poco
Lo peor: poca accion, más discusiones encendidas sobre tazas de te
Lo recomiendo: Mucho si leiste el primero
Lo releería: Sin duda es un libro que se beneficia de una relectura
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Bitterblink
Un libro para esta noche 