Este libro se trata de una rareza escrita por King. Rareza porque se aleja del tipo de literatura con la que nos suele deleitar y que comprende géneros centrados en la fantasía, el terror, la ciencia ficción y el drama romántico, principalmente. “Mientras escribo”, sin embargo, es un ensayo sobre la escritura. Y también sobre la juventud y niñez de King, sus primeros años como escritor, además de una oda al arte de escribir.
Es un libro que apareció de la nada sin hacer mucho ruido, y en la actualidad está siendo recomendado cada vez más por docentes en las universidades, en cursos de escritura y en talleres literarios (como ensayo y texto científico). Al fin y a la postre, no es más que un tratado que busca aconsejar a los escritores principiantes.
Hay que reconocer que fue un libro arriesgado por parte de King (aunque todo hay que decirlo, a estas alturas de la película tenía suficiente éxito como para permitirse lanzar algo temerario), especialmente por ser un escritor vapuleado por la crítica más purista. Aunque él lo sabe y se lo toma con humor. Antes de publicar “Mientras escribo” King ya vaticinó que sería recibido por la crítica como si la puta del pueblo quisiera enseñar modales a las señoras decente.
El ensayo consta de 4 partes diferenciadas:
– Curriculum Vitae: se trata de un paseo por los recuerdos del escritor, referidos principalmente a su niñez y juventud, en el que nos cuenta sus inicios en el mundo de la escritura. Conoceremos más de sus primeros recuerdos (algunos no relacionados con la escritura y sí con sus propios traumas como cuando le pincharon en los oídos), la relación con su madre y hermano, la universidad, sus inicios como escritor…Vemos que estos inicios fueron duros y que el éxito de King se debió mucho al trabajo y la perseverancia y poco a la suerte.
– La caja de herramientas y Escribir: comprendería 2 bloques intermedios y es el nudo principal del libro. King nos habla del arte de escribir, pero no de forma abstracta sino con ejemplos prácticos destinados a los principiantes. Habla primero de la caja de herramientas, los básicos que el escritor ha de conocer y manejar para escribir un libro (el lenguaje, vocabulario, gramática, estilo, forma, argumento, etc.). Cuando se domina lo anterior, entonces, hay que ponerse a escribir y King aconseja sobre las prácticas de un buen escritor (leer mucho y escribir mucho), los hábitos que podría seguir y la mejor forma de organizar el tiempo, cómo llegar a la esquiva inspiración y el concepto del lector ideal (su mujer, en su caso). Se trata de un compendio fácil, directo y muy práctico que puede orientar maravillosamente bien a quien decida hacer sus pinitos en esto de escribir.
– Postdata: Vivir: Esta última parte mezcla un poco las propias experiencias del escritor con un canto a la escritura y las ganas de vivir. Mientras King escribía este libro, sufrió un accidente gravísimo (fue atropellado por un camión) del que salió con secuelas, tuvo que sufrir varias operaciones, rehabilitación, etc. A día de hoy está casi recuperado pero la transición debió de ser complicada. Y en parte, King logró salir del bache por el amor de su mujer y por su necesidad de escribir. Así que King utiliza este ejemplo para explicar la necesidad que tiene el escritor de seguir escribiendo, uniéndolo con la alegría de vivir y las ganas de continuar en pie.
– Epílogo y varios: Al final King incluye también el borrador original de una de sus novelas cortas, 1408 y las posteriores correcciones que hizo a la obra. Culmina el libro con una lista de todos los libros que ha leído durante el último año (y que a mí me dejó alucinada ya que son, muchísimos!! Haciendo cuentas me salía que lee entre 2 y 3 libros a la semana).
Me gustó mucho este experimento del autor. Primero por explorar un género desconocido al que nos tiene tan poco habituados a sus lectores constantes. Pero sobre todo me entusiasmó esta obra por la sinceridad que emana de cada una de sus páginas. King no esconde nada en este ensayo, habla mucho sobre sí mismo, sus pensamientos, sus creencias y su pasado. Reconoce sus defectos en la escritura, sus libros malos, sus problemas con el alcohol y las drogas (graves hasta el punto de afirmar que no recuerda haber escrito partes de varios libros, entre ellos Cujo), así como el amor, respeto y admiración profundos que siente por su mujer, Thabita (está claro, detrás de un gran hombre, siempre hay una gran mujer :-)). Esta sinceridad es un reflejo del tremendo respeto que siente por sus lectores y eso es algo que yo, como lectora constante suya, agradezco muchísimo.
Además y esto es algo que gustará mucho a los fans de King, con este ensayo sabremos más cosas de muchos de sus libros (por qué y cómo los escribió, cuándo, anécdotas, etc.). Por ejemplo y sin pretender ser exhaustiva:
– Sus primeras novelas escritas fueron Rabia, la larga marcha y El fugitivo, aunque su primera novela publicada fue Carrie. Estas tres novelas las publicó posteriormente bajo el pseudónimo de Richard Bachman. Decidió utilizar un pseudónimo ya que uno de los críticos dijo que las novelas de King se vendían como churros sólo porque estaban escritas por él, sin importar si eran buenas o no. Así que King decidió usar el nombre de Richard Bachman y publicar en el anonimato. Y el resultado fue que también se vendieron como churros…
– Sabremos que uno de sus primeros relatos cortos fue “El último turno” o que su trabajo en lavanderías en su juventud le inspiró otro relato corto, “La trituradora”.
– Habla también bastante de muchos otros libros, como , Misery, Apocalipsis, La milla verde, El resplandor…
En resumen, pequeña maravilla literaria de este escritor. No excesivamente conocida pero que tiene muchos puntos positivos y que encantará a los fans de King y a todo aquel principiante en el arte de escribir.
Si quieres ser escritor, lo primero es hacer dos cosas: leer mucho y escribir mucho. No conozco ninguna manera de saltárselas. Cuanto más leas, menos riesgo correrás de hacer el tonto con el bolígrafo o el procesador de textos.
Por qué decidí leerlo: Como fanática de King no había excusa…
Lo mejor: Su autenticidad. Su respeto por los lectores. La gran cantidad de guiños a otros trabajos del mismo autor.
Lo peor: Es un ensayo para escritores principiantes o un libro para fanáticos del autor. Tiene un público, pues, reducido.
¿Volvería a leerlo?: Pues igual sí, me encantó lo auténtico que es.
¿Lo recomendaría?: Fans de King y escritores en potencia.
Otros libros del estilo que podrían gustarte:
– El derecho y el placer de escribir (Julia Cameron)
– Escritos sobre el arte de escribir (Franz Kafka)
Malosa.
Pingback: Quien pierde paga – Stephen King | Un libro para esta noche