Comenzó con Hija de humo y hueso, continuó con Días de sangre y resplandor y ahora Laini Taylor finaliza su saga con este Sueños de Dioses y Monstruos. Mi sensación es de pena, pena total y absoluta. No porque haya terminado esta saga, sobresaliente en sus dos primeros libros, sino porque haya finalizado con esta tercera parte, aburrida, sosa, ininteligible y muyyyyyy pesada. ¿En qué demonios estaba pensando Laini Taylor cuando escribió esta novela?
Sinopsis
Un enemigo común. Una causa común. Karou y Akiva ya saben que están vivos pero Karou aún no está preparada para perdonar. Y ahora, mediante un terrible engaño, Karou ha tomad
Opinión personal
En general y como os adelantaba arriba, la palabra que creo que mejor define este libro es el aburrimiento. Es cierto que en el último tercio el libro levanta un poco y su bonito final hace que la impresión final no sea tan amarga…pero claro, te has aburrido tanto hasta entonces!!!
Voy a empezar por las cosas positivas, que las hay. La primera de ellas es la fuerza que desprenden los secundarios: Ziri y Liraz, Mik y Zuzana, especialmente. Y también Eliza, personaje misterioso del que apenas se sabe nada y no será hasta el final que entenderemos su misión entre todas estas criaturas fantásticas.
Otro punto positivo sigue siendo lo que también caracterizó a las anteriores novelas de la saga, la fantasía del mundo que describe Taylor: ángeles, quimeras, resucitadores, magia, razas distintas, mundos paralelos…no presenta quizá tanta originalidad como en los anteriores tomos (no olvidemos que se trata de una tercera parte), pero sigue manteniendo alto el listón.
Desde luego lo mejor es el último tercio del libro y especialmente el final, que es lo que salva realmente esta historia: La forma de entrelazar los 3 tomos de la saga, el sentido del mundo fantástico creado por Taylor, el desenlace de las distintas líneas argumentales y razas que conforman Ereth, el suspense de conocer más y saber qué ocurre al final con los serafines y las quimeras, con Karou y Akiva…todo esto aumenta por fin el interés y hace que la impresión última de la novela no sea tan mala.
Lamentablemente, no puedo destacar nada más como positivo y casi todo lo que encuentro son aspectos negativos que paso a detallaros ahora:
En mi opinión hay multitud de cabos sueltos, cosas que no entendí. Por ejemplo:
- el capítulo con la fruta ensangrentada todavía estoy pensando qué demonios aportaba. ¿Soy yo la que me he perdido?¿Alguien me puede explicar qué significaba?.
- Los Stelians. La autora prácticamente sólo los nombra, apenas aporta detalles al respecto, sólo muy al final y escasos. Toda la figura de Akiva y su magia, todo lo relacionado con Sirithar y el Nithilam queda muy en el aire. Y es una pena, porque era con mucho lo más interesante de esta novela.
- ¿Y de Brimstone qué? Su poder para resucitar de dónde salió? ¿La historia que explica esta parte dónde está?
- Por último, lo más importante que no comprendí y que es básico para el desarrollo del argumento es todo lo relacionado con Haxaya. Hay un capítulo en el que la mención de este personaje es fundamental. Y yo aún estoy preguntándome por qué. Si alguien me lo puede explicar, quedaré eternamente agradecida, ya que probablemente haya sido yo quien no me haya enterado …
Mira que no soy nada épica, pero me faltó también la batalla final. Que se supone que estamos en guerra!! Siglos y siglos luchando quimeras contra serafines, 3 libros enteros hablando de las luchas entre las razas y el odio…y acabamos con esto? Ni una mísera batallita contundente??
El otro gran fallo de la novela son sus personajes principales:
- El femenino, Karou pierde la fascinación que la caracterizaba en libros anteriores, quizá porque no aporta mucho en el desenlace (salvo su labor como resucitadora, claro está) o quizá porque su historia de amor con Akiva se nos hace cuesta arriba ya. Están bien los amores imposibles, pero cuando se hacen TAN imposibles pierden un poco la gracia.
- El masculino, Akiva, tampoco tiene la fuerza necesaria para sostener la novela. De hecho, este personaje es un poco Gary Stu: perfecto, honorable, lleno de virtudes y con cualidades que nadie más que él tiene en el mundo fantástico creado por Taylor. La inclusión de este tipo de personajes es un defecto típico de escritores novatos de fantasía.
Y ya para finalizar os diré que aburrido no, lo siguiente. Páginas y páginas que sobran, no aportan nada a la trama (más que demostrar el dominio narrativo de Taylor) y se nos hacen eternas.
En fin, lo dicho. Una pena. En mi opinión es el peor de los tres tomos, con mucha diferencia. Está bien rematado, presenta un final bonito (aunque poco detallado), pero no me ha parecido una culminación a la altura de lo que merecía esta saga.
Por qué decidí leerlo: Porque quedé literalmente entusiasmada tras la lectura de los dos volúmenes previos.
Lo mejor: Todo lo relacionado con los Stelian, los Dioses Estrella, Sirithar y el Nithilam. El mundo fantástico que recrea Taylor. El último tercio de la historia y su final.
Lo peor: Los personajes principales y su historia de amor, se hace cansina ya. Lo larguíííííísimo que se nos hace este libro, a la novela le sobran la mitad de las páginas tranquilamente. La multitud de palabras, circunstancias y personajes que no entendí y que me aburrieron infinito.
¿Volvería a leerlo?: Ni loca, vamos. Con lo que me ha costado acabarlo, como para pensar en releer..
¿Lo recomendaría?: No, en ningún caso. Ni aunque te hayas leído los dos tomos previos. De verdad, imagínate un final para la saga y quédate con un buen sabor de boca. No estropees tu recuerdo con esta novela infumable, aunque su final sea bonito. No compensa leérselo todo hasta por fin llegar a él.
Si quieres comprar el libro pese a todo
Sueños de dioses y monstruos (Hija de humo y hueso 3)
Otros libros del estilo que podrían gustarte:
– Los juegos del hambre (Suzanne Collins)
– Cazadores de sombras, ciudad de hueso (Cassandra Clare)
– Partials, la conexión (Dan Wells)
Malosa