Película – El lado bueno de las cosas


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Reseñado por 0017

Ficha técnica

Año: 2012

Director: David O. Rusell (The Fighter, Tres Reyes)

Guión: David O. Rusell

Basado en el libro de Matthew Quick El lado bueno de las cosas” («Silver Linings Playbook»)

Música: Danny Elfman

Reparto

  • Bradley Cooper
  • Robert De Niro
  • Jennifer Lawrence
  • Jacki Weaver
  • Chris Tucker

Con ocho nominaciones a los Óscar de este año en los mejores campos artísticos, El Lado Bueno de las Cosas puede ser la gran sorpresa o la gran derrotada de la ceremonia. Tanto actores principales como de reparto, director, guionista y mejor película están en la recta final para dar un posible campanazo frente a Spielberg, Tarantino, Ang Lee y compañía.

Esta circunstancia hace que uno se acerque al cine más cercano embaucado por semejante publicidad con una mezcla de recelo y expectación ante lo que puede ser el  posible tapado de este año, si bien su paso por ceremonias previas se ha saldado con pocos triunfos (mejor actriz principal en los Globos de Oro para Jennifer Lawrence y poco más).

Desde luego que lo que nos encontramos es una película muy atípica, una comedia romántica poco habitual que nos mete de lleno en un mundo muy particular y extraño, con un universo de personajes a cada cual más “particular”. Es una especie de viaje a la locura interior del protagonista, una locura que a veces se hace molesta porque nos resulta algo familiar, como si fuera algo que de vez en cuando también nosotros sufrimos. Viaje que se materializa de manera jocosa en el concurso de baile final, en el número que montan los dos protagonistas después de semanas de ensayos (y que a la vista de los mismos, parecían más serios de lo que acaba siendo).

La película empieza con el personaje de Pat saliendo de un sanatorio mental. Pat sufre trastorno bipolar y era profesor de historia en el instituto de un barrio de Filadelfia. Su enfermedad se agravó cuando tuvo un primer estallido de violencia al descubrir la infidelidad de su mujer con un compañero de trabajo. Desde entonces tiene una orden de alejamiento y debe medicarse para contener su enfermedad, a la vez que un policía le controla sus idas y venidas y debe hacer terapia con un psicólogo. Desde entonces, su vida girará en torno a fijaciones enfermizas para recuperar a su exmujer, tales como leer compulsivamente los libros que ella enseña en el instituto, o adelgazar a base de hacer deporte a diario con una bolsa de basura encima de la ropa, para favorecer la sudoración…

En su casa, las cosas no pintan mejor. Su padre está obsesionado con las apuestas y no puede ver un partido del equipo de fútbol local sin su ritual de manías y supersticiones, entre las que se incluye la presencia de Pat a menudo, mezclándose el empeño por ganar dinero con el intento de reconciliación paternofilial. El hermano mayor de Pat es el triunfador de la familia, lo que no mejora las cosas demasiado. En medio de todo este mundo de obsesiones y neurosis, Pat conoce a Tiffany, con quien comparte enfermedad. La diferencia está en que después de enviudar Tifanny se convirtió en ninfómana, con la consiguiente pérdida del empleo. Sin embargo, la obsesión de Pat por su exmujer es tal, que a ella solo la verá como una amiga y confidente, hecho que la subyugará por ser la primera persona en meses que no la perciba ni la trate como un objeto sexual. Conforme avance la trama, nos daremos cuenta de las cosas en común que tienen ambos, de que las fijaciones y las obsesiones no son exclusivas de las enfermedades mentales, y de que a veces la auténtica esencia de la felicidad no reside en las cosas que creíamos en un principio. Y que no es difícil encontrar dicha felicidad, siempre que seamos capaces de ver, como repite el protagonista en más de una ocasión, el lado bueno de las cosas.

Como decía más arriba, estamos ante un caso atípico de comedia romántica, porque se trata de la típica fórmula “chico-conoce-a-chica” con la variación de “pero-no-saben-que-quieren-estar-juntos-hasta-el-final-del-metraje”. Lo excepcional del caso es que aquí uno no se da cuenta del género de la película hasta que llevamos una hora de cinta aproximadamente. De manera afortunada, los primeros compases son una presentación de eventos derivados del trastorno bipolar de Pat, más próximo a “Alguien voló sobre el nido del cuco” que a las películas de Nora Ephron. El momento en que se produce el primer ataque neurótico de Pat en casa de sus padres es de lo mejor de la película, una joya del montaje que mezcla tomas rápidas con la música.

Conforme avanza la trama, ésta se vuelve más comercial. Los personajes que rodean al protagonista siguen siendo igual de excéntricos (la verdad es que no se salva ni uno), pero ya no están rodeados de ese amargor inicial que nos desconcertaba al principio de la película. Descubrimos que el psicólogo que hace terapia con Pat es un hincha del equipo de fútbol; la hermana de Tifanny casada con el amigo no es tan bruja como pensábamos. Y la exmujer de Pat hace acto de presencia al final, con lo que ya no tiene ese halo de misterio que supone la continua mención de su personaje a lo largo de la película. Robert De Niro hace un personaje fuera del corsé de lo que llevaba interpretando estos últimos años; tanto, que por primera vez hubiera deseado escucharlo en V.O, sin la voz tan carismática de su doblador oficial en España. Realmente emociona verlo tan maniatado respecto a la enfermedad de su hijo. Jennifer Lawrence es capaz de darle veracidad a su personaje de ninfómana desbocada sin que en ningún momento veamos ese pasado suyo tan turbador, sólo lo deja intuir. Y Bradley Cooper, al elegir este papel demuestra que es del grupo de los actores guapos que va a intentar construir una carrera alejada de los papeles estereotipados de galanes y de resacones (o por lo menos, simultaneándolos). Lo cual dice mucho de él y lo demuestra el estar nominado por esta cinta, en la que a veces nos hace dudar acerca de su enfermedad y de la naturaleza de su carácter. No sabemos si va a resultar un tipo violento, o, por el contrario, existencialista de él, no son más que las circunstancias las que le arrastran al mundo problemático en el que se ha metido.

En definitiva, a diferencia de otros títulos también nominados (y que es probable que sean los que arrasen en los Óscar), ésta es una cinta más entretenida por lo que siempre digo que tiene que tener una película: un buen ritmo que no haga decaer la trama. No embauca con historias grandilocuentes del gusto de los ajados académicos de Hollywood, y precisamente no ganará en las categorías  de mejor película y mejor director precisamente por eso. Y precisamente, ésa es la razón por la que animo a acercarse al cine a verla.

Calificación: Entre entretenida y buena.

Lo Mejor: La capacidad de los actores protagonistas. Los citados momentos de crisis del protagonista buscando el video de su boda, y el concurso de baile final. Los chispazos graciosos que nos brinda de vez en cuando.

Lo Peor: Que pueda desconcertar al empezar como una cosa y terminar como otra.

La vería de nuevo: No, de momento.

La Recomiendo: Sí, como alternativa intimista a las grandes historias nominadas de los Óscar de este año.

Películas similares: Alguien Voló Sobre El Nido Del Cuco; Notting Hill; Amor Y Otras Drogas

Link a la BSO en Amazon.es: B.S.O. Silver Linings Playbook

Ficha en IMDB: http://www.imdb.es/title/tt1045658/

Tráiler en You Tube (español):

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