Antes de nada, he de decir que pensaba que esto era una novela larga y no un relato de poco más de 60 páginas (es lo malo del libro electrónico…que al no ver el grosor, a veces no sabes ni lo que vas a leer). Esto es importante porque influyó en mis expectativas: yo quería un libro contundente, tenía ganas de una historia de terror de las buenas…y la propuesta de Eugenio Prados se me quedó muyyyyyy corta. Así que esta decepción ha hecho también que la novela se quede con una calificación algo baja. Igual merecía un poco más.
Sinopsis
Un condenado a muerte escapa del furgón que lo trasladaba para ser fusilado y se adentra en un solitario páramo huyendo de la policía. Allí descubre un pueblo abandonado en el que ve el refugio perfecto. Pero pronto descubrirá el misterio que encierra aquel lugar y se dará cuenta que escapar de la ley será el menor de sus problemas.
Opinión personal
Me gustan los relatos cortos, no penséis que ha sido la longitud lo que ha determinado que no me convenza la novela. Además, los escritores que se atreven con ellas merecen todo mi reconocimiento, porque creo que es mucho más difícil lograr un buen relato corto antes que una novela larga. Has de ser concreto pero profundo, original en el planteamiento y no tienes el recurso de irte por las ramas. El problema de La tumba del niño es que creo que cojea en la parte de profundidad.
Nuestro autor lleva muy bien toda la tensión del relato, sobre todo a partir de una atmósfera baldía, lugares inhóspitos y recónditos, así como personajes extraños y algo malignos. Esta atmósfera logra contagiar de angustia al lector, le traslada perfectamente a este paraje maldito.
Un ritmo muy bien llevado, sí. Pero no logra el objetivo de la novela y que no es otro que asustar. A mí personalmente esta historia no me dio miedo en ningún punto, ni siquiera con su final, que tampoco sorprenderá mucho al lector.
Adicionalmente, el otro pero que le puedo sacar a esta historia y que ya mencionaba al principio es su falta de profundidad, especialmente visible en sus poco esbozados personajes. Ni siquiera el condenado a muerte es definido mínimimante en este relato y eso que se cuenta desde su perspectiva. Vale que nos encontramos ante una novela corta, pero eso no es excusa para sentar las pautas claves de una buena historia. Y los personajes es una de ellas.
A pesar de todo lo anterior, no se le puede negar a esta historia que es entretenida y que recupera la esencia básica del terror, últimamente relegada en favor de la ciencia-ficción o el romanticismo vampírico. Así que por esto, por su impecable ambientación y porque está a un precio en Amazon inmejorable (ahora mismo podéis comprarlo por 0,89€), no dudaría mucho en adquirirlo si os apetece leer algo del estilo.
Por qué decidí leerlo: Tenía ganas de una novela de terror larga y que asustara. Pero me equivoqué de objetivo.
Lo mejor: Su atmósfera opresiva y que nos retrotrae a las historias de terror de siempre.
Lo peor: Corto, poco original, con poca profundidad en su argumento y personajes.
¿Volvería a leerlo?: No, no da para una relectura.
¿Lo recomendaría?: Es tan corto y tan fácil de leer (además de barato en Amazon) que no diría que no.
Link al libro en Amazon.es (solo versión electrónica, por menos de 1 euro)
Año: 2013
Director: Joseph Kosinski (Tron Legacy)
Guión: Joseph Kosinski, William Monahan, Michael Arndt, Karl Gajdusek
Basado en la novela gráfica de Joseph Kosinski
Música: M83
Fotografía: Claudio Miranda
Reparto
Tom Cruise
Olga Kurilenko
Morgan Freeman
Andrea Riseborough
Nicola Coster-Waldau
Oblivion es un término anglosajón que viene a significar “olvido”. Conviene tener esto en mente mientras se ve esta película puesto que todo tendrá más sentido al término de la misma, donde las interpretaciones y reflexiones encajarán como las piezas de un puzzle para darle un sentido global a la obra. Efectivamente, es una cinta sobre el olvido y el recuerdo, y nuestras ansias de trascender lo rutinario para perpetuarse en la memoria individual y colectiva. En este caso, el material del que se ha sacado el concepto inicial de Oblivion es de una novela gráfica de su director, Joseph Kosinski.
Nuevamente tenemos a Tom Cruise en uno de esos papeles que le encantan y que tan bien saber llevar adelante, porque le permite ser el rostro visible de una gran superproducción y cohesionar todo el conjunto a golpe de liderazgo basado en la interpretación de la mayoría del metraje, el rodaje personalizado de las escenas de riesgo y la cesión de parte del protagonismo a secundarios solventes (firmemente establecidos como Freeman o recientemente iniciados como Kurilenko o Risenborough). Al igual que ocurrió en Jack Reacher, su sola presencia atrae a público a las salas e impregna su sello y su carisma personalizado a la cinta.
Estamos en el año 2077. Sesenta años después de una invasión galáctica de una raza alienígena, la humanidad ha ganado la guerra pero a costa de devastar con armas nucleares el planeta tierra. Todos los habitantes se han ido a colonizar la luna de Saturno, y los últimos recursos naturales están siendo extraídos por alta tecnología antes de abandonar definitivamente el planeta. Jack Harper es un técnico reparador de drones, unos centinelas robóticos equipados con armamento avanzado que protegen y evitan el boicot de la operación por los últimos alienígenas derrotados tras la guerra. Jack se dedica a patrullar el planeta en soledad, ayudado por su compañera de equipo de trabajo y también pareja, Victoria. Ambos con la memoria borrada por cuestiones de seguridad, Vic le asesora e informa desde la torre de control en las alturas en la que viven, mientras reciben órdenes e instrucciones del contacto que tienen en el centro de control espacial de la misión. Con suerte, les quedan pocas semanas para acabar la tarea que han recibido y poder marcharse a Saturno con el resto de la humanidad. Aunque Vic está emocionada con la idea de emprender una nueva vida, Jack tendrá no obstante algunas dudas sobre el abandono del planeta, agravadas por sueños recurrentes con una mujer en una época anterior a que él naciera, antes de la devastación terráquea, en medio de la antigua civilización humana. Con la cantidad de tiempo que pasa solo recorriendo el planeta, añorando épocas pasadas y con un refugio secreto en mitad de un paisaje idílico, en el que va recopilando todos los vestigios de la antigua civilización que puede recoger, la tranquilidad de Jack se verá alterada por la llegada de una cápsula espacial con humanos hibernados, entre ellos la misteriosa mujer con la que sueña recurrentemente. Este descubrimiento provocará una serie de acontecimientos que harán a Jack replantearse sus convicciones y sus sentimientos, poniendo en sus manos el destino último de la civilización y del planeta.
Con Oblivion tenemos una interesante aportación al género de la ciencia ficción en el cine. Bebiendo de una gran mayoría de conceptos ya tratados, el resultado es novedoso y nos deja una nueva visión de un futuro apocalíptico y del destino de nuestra civilización. Tenemos la idea conceptual del hombre solitario deambulando con un arma por los últimos vestigios de la civilización (El Planeta de los Simios), y enfrentándose a misteriosas criaturas (Soy Leyenda, El último hombre vivo); sueños extraños acerca de un pasado y con mujeres misteriosas que, aparentemente, nunca han existido (Desafío Total); el último técnico que tiene la misión de reparar tecnología en un entorno devastado mientras va recopilando trastos pertenecientes a anteriores épocas, símbolos de una cultura que ya no volverá, capaz de apreciar la belleza de un vegetal que sobrevive en un inhóspito territorio (Wall-E); una humanidad que se ha visto en la necesidad de emigrar y colonizar otros mundos (Blade Runner y su fundacional “Sueñan los androides con ovejas eléctricas”); supervivientes que han conseguido superar el cataclismo nuclear y malviven escondidos en catacumbas (La máquina del tiempo)…
Como se puede ver, la lista de fuentes de ciencia ficción de las que bebe esta cinta es muy amplia. Un mérito a mi modo de ver, es que a pesar de todo, no resulta repetitiva. En ningún momento explica algo que ya se haya abordado con anterioridad. Se adentra en nuevos terrenos filosóficos, y nos da una nueva visión de las preocupaciones humanas que siempre existirán estemos en la época que sea.
Otro mérito que veo es el presentar un buen e hilvanado argumento. Con menos escenas de acción de las que podríamos haber pensado que tendría la cinta, el metraje se toma su tiempo para ir al grano y provocar el desenlace. Digamos que dura más el planteamiento y el nudo. En algunos momentos estamos solos con el personaje de Cruise, observamos el paisaje con él (magnífica labor de fotografía y de diseño de producción) y somos testigos silenciosos de su devenir por las ruinas de un planeta otrora suntuoso. Los momentos reflexivos le ganan la partida a la acción continua. Y, en un determinado punto, cuando el público se pregunta por donde irá la resolución de la cinta, se produce una sorpresa de guión muy agradable por inesperada que lleva el argumento por otros derroteros y es ahí cuando el término Oblivion adquiere el sentido de “olvido” del que hablaba en mi primer párrafo.
Quizás el mayor fallo sea precisamente el que Kosinski, (al igual que en Tron Legacy) no sea capaz de rematar la conclusión de la cinta en un tiempo (y tempo) adecuado. Ha preferido decantarse en el último tramo por un final convencional pero que peca de excesiva tranquilidad. Si en Minority Report teníamos una trama que avanzaba continuamente a golpe de persecución, aquí tenemos una cierta lentitud que recorre el metraje y con la que se ha tomado su tiempo en presentarnos al dúo protagonista (antes de que se convirtiera en trío con las implicaciones emocionales que presenta). Toda una metáfora sobre la vida en pareja y nuestra compatibilidad con las personas con las que compartimos la vida, donde a veces un equipo eficiente (según una frase sacada de la película) no resulta la mejor unión sentimental.
En esta ocasión, a pesar de los minutos que Cruise acapara en pantalla (a diferencia de Jack Reacher), deja algo más de protagonismo a las secundarias, tanto Olga Kurilenko como Andrea Riseborough, para su lucimiento personal. Ambas brillan con luz propia aunque el papel de ex-chica Bond sea más convencional por especializarse en «chicas guerreras»; mientras que el papel de Riseborough crea más desosiego por hacer que planee la desconfianza y su interés por abandonar el planeta, por encima de la relación que mantiene con Cruise. Morgan Freeman se muestra menos y quizá su personaje esté más desaprovechado, dado que podría haberse prodigado algo más en pantalla.
En definitiva, película entretenida y bastante agradable de ver. Mejor que la adapación de Cruise/Spielberg de «La Guerra de los Mundos«, aunque por debajo del nivel de la excelente «Minority Report«; con muchas aportaciones al género aunque no resulte obra maestra imprescindible del mismo, puesto que como simple obra del séptimo arte le falta algo más de garra en su ritmo (siempre el ritmo… la clave fundamental para mí en cualquier película). Sin embargo, las implicaciones argumentales y temáticas que deja al salir de la sala para que las reposemos un par de días son tan importantes que por eso merece que recomiende el verla.
Richard Matheson no solo es uno de los mejores autores de terror y ciencia ficción de todos los tiempos sino que también es uno de esos que los estudios eligen con frecuencia para convertir sus relatos a películas con desigual éxito. En esta página podéis encontrar las críticas de sus dos mejores novelas, «Soy Leyenda» decepcionantemente llevada al cine por Will Smith y «La Casa Infernal» que sin duda es la novela que realmente da forma al género de «casa encantada».
Pesadilla a 20.000 pies, otro relato de Matheson convertido al cine
En este caso nos enfocamos en una colección de cuentos, puesto que Matheson es un fabuloso escritor de cuentos, muchos de los cuales en uno u otro momento se han convertido a la televisión (como capítulos de Twilight Zone por ejemplo) o al cine como uno de los relatos de esta colección, «Acero Puro» llevado al cine convirtiendo un relato de apenas 5 páginas en una película de casi dos horas con Hugh Jackman con protagonista. Ya veréis que dice de forma muy apropiada que la película está inspirada (que no Basada) en el relato, vamos que se parecen como un huevo a una castaña.
Pero vamos uno por uno por los relatos de esta colección:
El ser
Una pareja viaja en coche atravesando EEUU hasta que paran a echar gasolina. Allí un extraño hombre les ofrece ir a ver su zoológico. Cuando llegan sin embargo se dan cuenta de que el hombre desea que formen parte de él.
Este relato ahora resulta tópico pero en su momento fue original. Es un relato de terror clásico donde sin embargo el verdugo parece tan víctima como sus víctimas y sin embargo no puede escapar a su destino por el mal que ha causado. Una curiosa reflexión sobre enfrentarse a órdenes para hacer algo terrible y escudarse en «no tengo alternativa», tipo los soldados Nazis de los campos de concentración… terrible y también predecible. Pasable
Acero Puro
Steel, un ex-boxeador ahora dedicado a las peleas de robots, lleva a su luchador, Maxo a luchar contra un nuevo y reluciente modelo de robot en una liga de segunda regional. Él y su mecánico necesitan desesperadamente el dinero de la pelea puesto que no pueden reparar a su vieja máquina. Sin embargo una avería inesperada antes de la pelea les hace tomar una decisión drástica.
Es un relato sobre el tema central de la obra de Matheson, lo que significa Ser humano y la responsabilidad que ello acarrea. El autor aquí celebra una cualidad que no todo el mundo posee, la cualidad que nos hace sobresalir por encima de la máquina, la cualidad de no darnos por vencidos incluso aunque sepamos que no podemos ganar. Hermoso relato, no tiene nada que ver con la película pero es bueno.
Una manera de sobrevivir
Este cortísimo relato habla de la extraña vida de un hombre que escribe. Es tan corto que no puedo contaros mucho más, solo que os fijéis en un detalle, aunque parece lo contrario solo hay un personaje en el relato. Así ataréis cabos con el entorno que describe (quemado, agrietado y destruido).
Este relato habla sobre el poder de la rutina para enfrentarnos a los sucesos devastadores de la vida. Esa capacidad de los hombres para imaginarnos una vida mejor y materializarla solo mediante rutina, es eso, una forma de sobrevivir. Difícil de entender y preciosa en el fondo. Bueno.
El exámen
Un hijo intenta ayudar a su padre de 80 años para que pase un examen de aptitud mental. Aparentemente la superpoblación hace que los que no pasen el examen a partir de una edad deben… desaparecer.
Un duro relato que hace un análisis sobre la sociedad actual en que los hijos desean en un determinado momento deshacerse de los ancianos que nos han cuidado pese a que los amamos. Es ese sentimiento culpable que a la vez desea que se mantengan con vida y a la vez desea que desaparezcan. Tan real como terrible. Muy bueno.
El hábito hace al monje
Un hombre habla con otro en una fiesta. Se queja de una extraña afección mental de su hermano que parece obsesionado con su ropa y con que no pude hacer nada si no va vestida «como un hombre», con un final sorprendente.
Es una pequeña y divertida crítica sobre la ropa de oficina y lo crítico que algunos consideran el traje y la corbata y lo ridiculiza con su habitual agudeza. Entretenido.
Hijo de Sangre
Un niño extraño termina de perturbar la tranquilidad de su comunidad cuando afirma que desea ser un vampiro. Y quizá no se trata solo de un deseo. Es una extraña historia sobre lo que significa ser diferente y no saber porqué. Entiendo que es un relato sobre la adolescencia como metáfora. Perturbador. Pasable.
El Invasor
Uno de los mejores relatos del libro. Curiosa reflexión sobre si un hombre puede aceptar que su mujer tenga un hijo de otra persona y perdonarle. Bueno.
Cuando acaba el día
Un extraño cuento sobre un poeta que es a la vez el último hombre sobre la tierra. Sufre una desgarradora tristeza y a la vez se siente dichoso por ser un artista que puede hacer el último poema. Es una curiosa reflexión sobre esas personas que necesitan que les ocurra una desgracia para ser «interesantes». Curiosa.
El Niño curioso
Una extraña historia sobre un hombre que paulatinamente va olvidando todo. Te hace sentir vulnerable la verdad, tiene esa extraña virtud, aunque es de los más flojos del libro. Pasable.
El último día
El último día de la tierra justo antes de que choque con el sol. El protagonista va recorriendo toda la extraña orgía de la casa en la que ha ido a pasar el último día y simplemente se replantea cómo desea pasar el último día.
Es una hermosa reflexión respecto a cómo pasar el último día. Una que no se me había terminado de ocurrir. Con quién pasarías el último día, con quién estarías completamente a salvo y a gusto en tu última hora. Hermoso, para mi gusto el mejor relato de todo el libro.
Una niña extraviada
Otro relato añejo. De esos que ya no sorprenden, basado en un concepto científico teórico, en este caso un bebé que desaparece en un plano dimensional distinto. No es gran cosa en este momento. Pasable, quizá en su momento pudo ser un relato sorprendente.
Un compañero de juegos
Dos padres atribulados deciden comprar un bebé robot capaz de crecer para hacer compañía y calmar a su hipertravieso hijo. Sin embargo las cosas no salen como ellos esperan y sin embargo conseguirán al hijo perfecto que ellos ansían.
Una reflexión más propia de Asimov sobre la ausencia de maldad de las máquinas, sobre su inocencia básica. Interesante aunque también un relato menor. Entretenido.
El libro en su conjunto
Es una colección de relatos sobre la ética y el ser humano, bien elegidos por su temática y sin embargo apoyados absurdamente en la película que ha dado a conocer este relato. Digo absurdamente porque considero que el libro es muy superior a la película. Me gusta mucho el Matheson cuentista y este libro no me ha decepcionado sobre todo en algunos relatos.
Si queréis leer un libro diferente quizá este grupo de historias os guste. Apto para todos los públicos y sin duda mejor para gente capaz de darle una segunda pensada a lo que leen debido a las poderosas metáforas que son estas historias.
Calificación: Bueno
Lo Mejor: El Invasor, El último día, las moralejas, las metáforas sobre lo que significa ser hombre y los males que sufrimos por ello
Lo Peor: Algún relato ha perdido fuerza con el tiempo
Lo Releería: Es un encantador libro para releer
Lo Recomiendo: Para aficionados a la ciencia ficción clásica, no os decepcionará.
Bueno, bueno, bueno…aquí tenemos la última novedad del controvertido Dan Brown. El autor rescata de nuevo a su protagonista favorito, el profesor de simbología Robert Langdon y le enfrenta a un peligro que puede acabar con el mundo y que sólo él podrá detener resolviendo una serie de pistas y códigos secretos a lo largo y ancho de distintos países europeos. Sexta novela publicada por el americano y cuarta protagonizada por el famoso profesor. El propio escritor afirma que esta es su novela más ambiciosa.
Sinopsis
En el corazón de Italia, el catedrático de simbología de Harvard Robert Langdon se ve arrastrado a un mundo terrorífico centrado en una de las obras maestras de la literatura más imperecederas y misteriosas de la historia: el Infierno de Dante. Con este telón de fondo, Langdon se encuentra a un adversario escalofriante y lidia con un acertijo ingenioso en un escenario de arte clásico, pasadizos secretos y ciencia futurista. Apoyándose en el oscuro poema de Dante, Langdon busca respuestas y personas de confianza en una carrera contrarreloj antes de que el mundo cambie irrevocablemente.
Opinión personal
Antes de empezar a comentar nada más, os diré que no, no me parece esta su novela más ambiciosa. Y tampoco me parece la mejor que tiene. Brown mejora ciertas cosas en esta novela y que no había sido capaz de rematar en sus anteriores (como por ejemplo el final), pero también flojea en algunas de sus señas de identidad más características y aquí me estoy refiriendo a su capacidad de enganchar al lector. En esta novela esto brilla por su ausencia.
Vamos a empezar por lo malo. Es la primera vez que un libro del americano me resulta un tostón. En mi opinión, esta novela es francamente aburrida en su desarrollo. Comienza con un principio casi adrenalítico, presentando al profesor Langdon recién disparado, con amnesia y sin saber dónde está. En seguida la acción cobra fuerza y el lector casi tiene que agarrarse a la silla para no derrapar en las curvas. Pero este ritmo álgido dura muy poco y al estabilizarse viene la caída. Brown entra en una espiral descriptiva de cada monumento, edificio, obra de arte, instrumento, código que excede la capacidad de atención del lector. En mi caso, tuve que releer literalmente páginas porque me había puesto a pensar en otra cosa. La única parte que sube un poco el nivel es la relacionada directamente con la divina comedia de Dante, sus versos, los cuadros, la simbología…pero aún así no logra captar al lector y resulta repetitivo. Al final la novela remonta de nuevo y además, como os decía, nuestro autor sabe resolverla medio bien (por una vez!!). Pero en cuanto a entretenimiento asegurado, marca de la casa de Dan Brown, esta novela suspende.
Siguiendo con lo negativo, Dan Brown sigue siendo un escritor mediocre, de discutible calidad literaria, aunque también creo que su estilo va mejorando poco a poco en sus novelas. Esta última me parece la más solvente en este aspecto. Brown sigue apostando por diálogos rápidos y efectivos, capítulos cortos y con finales en suspenso entre ellos. Esta vez cuida algo más su expresión, tiene un ritmo más pausado. Por ejemplo, sus diálogos tienen mayor coherencia y no son casi de vergüenza ajena como pasaba en El codigo Da Vinci.
Sin embargo y pese a todo lo anterior, lo verdaderamente negativo de esta novela es que su concepción no se sostiene por ningún sitio. Es decir, no tiene ninguna lógica que el antagonista deje media Europa llena de pistas y acertijos a partir de la Divina Comedia para que Langdon las resuelva y le encuentre a tiempo de evitar la catástrofe. ¿Por qué? En esta novela no tiene sentido que el malo quiera ser encontrado. No tiene sentido que deje pistas. Así que ya el planteamiento de partida del libro, falla.
En la parte positiva, tengo que destacar como bueno algo que tradicionalmente Brown hacía muy mal, pero que muy mal y que esta vez ha hecho bastante bien. Y es el remate de la novela. No sólo por incluir giros no esperados en la resolución, sino por ser capaz de plantear un final controvertido a la vez que arriesgado, poco convencional y que favorece el debate ético. El autor de forma subrepticia nos hace partícipes de su opinión en esta disyuntitva ética que plantea, opinión que no comparto, pero aún así eso no impide que no me convenza el final. Abro un spoiler para hablar un poco más de esto:
El fin justifica los medios. Esta aseveración es la base de la novela y la que nos deja caer Brown como quien no quiere la cosa. Ante un fin más elevando, reducir la superpoblación mundial para evitar la extinción de la población, se justifica cualquier medio utilizado como estirilizar a 2/3 de la población. El debate que suscita esto es cuanto menos interesante. Yo no estoy de acuerdo, nunca he compartido que el fin justifique los medios sobre todo cuando se ataca la libertad personal de forma tan frontal. Pero como decía, me gusta cómo el americando remata su novela y la reflexión que abre.
/ ************************ FIN SPOILER ************************ /
Creo que tiendo a ser muy benevolente con este autor y suelo calificarle mejor que a otros muchos que merecerían más. Y esto me pasa porque Brown tiene algo que a mí me gusta mucho y es su capacidad de hacer al lector replantearse ideas, principios o enseñanzas que toda la vida había dado por buenas. Lo fácil de leer a este autor es, o bien creerse todo lo que sugiere o bien desacreditarle totalmente por su falta de documentación (que es cierto existe, pero eso no supone que todo lo que diga sea falso). Creo que, como en casi todo, en el punto medio está la virtud y ahí es donde Brown luce. Consigue que el lector busque en Internet, se autopregunte. Explota su capacidad de criticar lo establecido. Ese matiz rebelde, aunque sea un intento de posicionarse en una casilla de provocador, me gusta. Y creo que es lo mejor de Brown.
En resumen, novela no muy lucida en su conjunto. Con un gran principio y un buen final, pero un desarrollo mediocre y lo que es peor, aburrido. No me parece un gran libro, pero las preguntas que plantea Brown y sobre todo el debate ético que puede suscitar esta novela hacen que su lectura no me resulte tan prescindible.
Por qué decidí leerlo: Aparte de porque era el libro de moda de este mes y casi diría el lanzamiento del año, tengo cierta tendencia a leer y disfrutar a este escritor.
Lo mejor: La controversia que suscita Brown. El final que plantea, esta vez me convence. Todo lo relacionado con la divina comedia de Dante.
Lo peor: Que esta novela tiene un principio y final adrenalíticos, pero hace aguas en el desarrollo: es un libro aburrido. La propia base de la novela no tiene lógica. El estilo de Brown, mediocre cuanto menos.
¿Volvería a leerlo?: No, para nada. Y será el único libro de Brown que no releería para pasar el rato.
¿Lo recomendaría?: No lo tengo muy claro. Es muy posible que se te haga pesado y te aburra. Me parece que el debate que genera es interesante, pero no sé si compensa leer el libro sólo por eso. Yo me leería antes Angeles y demonios (en mi opinión es el mejor que tiene) o incluso el famoso Código Da Vinci.
Como novedad Amazon permite la descarga gratuita de la versión electrónica del primer capítulo del libro
Estrenada hace un par de meses en las carteleras españolas, Un amor entre dos mundos (Upside Down en el original) es una producción canadiense del director argentino Juan Solanas, con un reparto basado en rostros internacionales para garantizar la afluencia de público. Se trata de una cinta que cuenta con un cautivador punto de partida y una idea original para diferenciarse del resto de taquillazos actuales, pero acaba siendo poco satisfactorio en su resultado final.
El argumento es el siguiente: estamos en un particular universo donde existen dos planetas que orbitan juntos, uno justo encima del otro. Cada uno con su propia gravedad, existen unas reglas físicas que se cumplen como resultado de esta particular situación. Como por ejemplo, la materia perteneciente a cada planeta se verá atraída por su propia gravedad, incluyendo personas, edificios, fauna y flora. Estos dos planetas dan lugar a dos mundos diferentes, uno arriba y otro abajo, con sus propios habitantes que tienen prohibido el contacto entre ellos, salvo en determinadas zonas de unión, como en un edificio construido con el fin de unir los dos planetas y realizar tareas de investigación común. La consecuencia de la separación de estos dos mundos es que en el planeta de arriba tenemos a una sociedad próspera y rica, mientras que el mundo de abajo es un sitio lúgubre, menos avanzado y con la gente luchando por malvivir.
En este entorno es donde tenemos a Adam, un niño del planeta inferior que conoce a Eden, una niña del mundo de arriba y se hacen amigos. Ambos empiezan una relación prohibida que continúa con el paso de los años, donde sus furtivos y amorosos encuentros tendrán lugar en zonas elevadas donde los dos planetas se acercan casi hasta tocarse. Un día, las policías fronterizas de los dos mundos les descubren, y las consecuencias de su actitud prohibida supondrán la separación de la pareja. De esta manera, pasarán los años en sus respectivos mundos sin que ninguno tenga más noticias del otro. Pero Adam está demasiado enamorado como para olvidar a su platónico amor, y traza un plan para infiltrarse en el mundo de arriba. Con la ayuda de una sustancia de su invención que tiene las características de la gravedad de los dos mundos, se hará pasar por un habitante del mundo opuesto al suyo para encontrar a Eden, ayudarla a recordar sus sentimientos, y continuar una relación prohibida e imposible a la vez que se hacen todo tipo de cabriolas físicas, sociales y argumentales para que triunfe el amor verdadero por encima de las normas establecidas.
La verdad es que hay que reconocer un esfuerzo por el planteamiento tan original que supone esta película. No ya por la historia de amor imposible con tintes shakesperianos en sí, más bien por la vuelta de tuerca argumental y el reto visual que resulta por llevarla a cabo y hacerla realidad. Es decir, que a nivel visual y conceptual la película triunfa. Un planteamiento tan inverosímil como que exista un mundo paralelo en un plano opuesto al nuestro, con sus habitantes y su sociedad prohibiendo la interacción recíproca, se plasma en imágenes hermosas y metafóricas, donde funciona el juego de perspectivas contrapuestas y planos fotográficos de paisajes y personajes dados la vuelta. En el tema artístico y de diseño de producción la propuesta de Solanas ya se anota varios tantos. Esta premisa argumental permite tanto escenas románticas de gran calado (parece que a Kirsten Dunst le van los besos en posiciones que desafían la ley de la gravedad) como momentos de aventura y persecuciones por las alturas (o bajuras, según se mire). Como en toda historia en la que el protagonista se cuela en sitios que no debe, con un tiempo límite para entrar y salir, tenemos tensión y emoción que le da un toque trepidante a la cinta.
Sin embargo, y a pesar de estos logros, la cinta hace aguas en cuanto le aplicamos algo de lógica al argumento. No se trata de ser incrédulos con una historia que es más bien una fábula de fantasía, un cuento de hadas moderno. En un primer acercamiento, bien haremos en creernos sin rechistar lo que nos proponen. El problema surge según avanza el metraje, con esos fallos de guión y de continuidad en el planteamiento que nos han explicado al principio. Hay momentos de interacción entre los dos mundos opuestos que están cogidos por los pelos, incursiones del protagonista y otros habitantes del mundo de abajo en el mundo de arriba (y viceversa) que no tienen sentido o que deberían estar mejor explicadas, y eso al final, hace que la calidad fílmica se resienta. Pero lo que es más grave, durante toda la película orbita la idea de que no tiene nada relevante que contarnos. Asistimos a situaciones de amor y desamor, para que luego vuelva a triunfar el amor y nuevamente fracase. El ritmo de la trama se resiente con este trasunto de Romeo y Julieta, de los que sabemos que no deben estar juntos y que sin embargo ignoran continuamente las convenciones sociales, políticas e incluso cosmológicas.
Por otro lado, también hay una fallida lectura social acerca de las diferencias económicas entre zonas ricas y zonas pobres, pero incluso en este capítulo resulta infantil la lección que nos quieren inculcar. Es decir, que los dos mundos están separados y no existe apenas contacto, pero uno es más rico que el otro porque se explotan de manera egoísta los recursos naturales sin destinar nada de los beneficios. La pobreza, la marginación, (parece que hasta incluso el frío), son consecuencia de que en el mundo de arriba sean todos prósperos. Abajo son más pobres, su aspecto es más desaliñado pero son felices; y el que la estética (como los coches patrulla, la represión policial) sea más parecida a la de la Alemania del Este supongo que no es culpa de nadie de abajo.
Todo esto da como resultado una película que funciona y se mueve mejor en el plano visual que en el argumental o ideológico. Un planteamiento brillante, con buena factura técnica e interpretaciones correctas, que se va desinflando poco a poco, perdiendo fuelle conforme pasa el metraje y resultando decepcionante en su tramo final. Una pena, porque a pesar de varios aciertos, la cinta de Juan Solanas podría haber dado para bastante más.
Calificación: Entre pasable y entretenida
Lo Mejor: La idea, la fotografía, los hallazgos visuales. Su historia cargada de poesía.
Lo Peor: Que la poesía se va convirtiendo en prosa sin darse cuenta y acaba lastrando el resultado final hacia la mediocridad, haciendo pesado el argumento.
La vería de nuevo: Es posible, para ver si la doy una nueva oportunidad con una nueva calificación o no.
La Recomiendo: Para ir al cine en pareja, pues es una historia de amor algo almibarada, aunque también la recomiendo para aquellos amantes de la ciencia ficción de fantasía.
Nick Hornby es uno de mis autores preferidos, así que podéis leer sobre su vida y milagros en la reseña de Un Gran chico en esta página. En su lugar voy a hablar sobre esta novela, escrita en 1995 y posteriormente llevada al cine en 2000 de Stephen Frears y protagonizada por John Cusack, convirtiéndose en una de las comedias más solventes de esa década, hasta el punto que ha llegado a convertirse en musical de Broadway en 2006. Quiero comentar con esto que este libro no es un libro cualquiera ya que es uno de esos raros casos en los que la película rivaliza con el libro.
Vamos al lío. Rob Fleming es el dueño de una tienda de música en Londres. En ella trabajan sus dos empleados Dick y Barry que son principalmente sus amigos. En esta tienda los tres se entretienen vendiendo esencialmente lo que les gusta y ahuyentando a los clientes que no compran lo que ellos quieren o que demuestren su «ignorancia» musical. Compiten para ver quién es el que sabe más de música y hacen listas de casi todo lo que odian y lo que aman.
La vida de Rob da un giro cuando su novia Laura decide que no puede con la incapacidad absoluta de Rob para comprometerse con algo y le abandona, por su más odiado enemigo: su vecino. Es entonces cuando Rob duda de todo y decide intentar averiguar si todo ha sido siempre culpa suya. Para ello se pone en contacto con todas sus ex-novias y aunque no ceja en su empeño de reconquistar a Laura un día surge una nueva chica en su vida.
Este argumento de lo más «corriente» esconde una de las más descacharrantes comedias sobre la llamada «crisis de los 30». Se orienta a estudiar a Rob como un individuo que sigue considerándose joven a sus 36, que piensa que le queda mucho y muchas mujeres por delante y por eso se niega a comprometerse un poco más pese a que reconoce que con Laura nada iba mal.
El autor hace un genial trabajo con el personaje de Rob y el de Laura hasta el punto que pese a la distancia es difícil no identificarse con esos personajes que tienen vidas y discusiones tan frecuentes y normales como en cualquier pareja que he conocido.
Me encantan todos los personajes secundarios, pero la mención especial es para Dick y Barry, los «empleados» y a la vez mejores amigos de Rob, tan diferentes y a la vez tan unidos al personaje principal por sus gustos que me recuerdan a un grupo de amigos real, donde somos todos distintos y solo nos unen 4 cosas esenciales.
Las referencias musicales a veces son un poco oscuras ya en los años que corren, pero si eres de la época entenderás el 90% de los chistes, sin embargo es normal que se escapen algunos. Hay muchos chistes graciosos que tienen que ver con la música y con las famosas listas y cintas recopilatorias que se dedican a grabar, se nota el conocimiento musical del autor por encima de la media.
Encuentro genial que aunque haya momentos tristes, se alternan de forma inteligente y premeditada con situaciones graciosas o ridículas que hacen que desdramatices el momento y entiendas mejor lo que está ocurriendo. Hornby utiliza el humor de forma genial para que el lector pueda separarse del personaje y de sus sentimientos y verlo todo desde fuera. De esta forma es más fácil ver cuando un personaje con el que es tan fácil empatizar como es Rob se porta como un crío o es un idiota, algo mucho más difícil «desde dentro».
Me parece un libro corto y encantador que además estuvo acompañada de una película tan genial como el libro, con John Cusack genialmente acompañado por Jack Black (quién si no) como uno de los empleados de la tienda. Comentar que una de las escenas más descacharrantes del libro se eliminó de la película pero se grabó, que es la de la «subasta inversa». Si conseguís un DVD de la película es fácil encontrar la escena en la parte de escenas eliminadas. Recomiendo mucho la película también, muy fiel al libro.
En general es un libro muy bueno sobre las dudas de los 30 y nuestros propios mitos absurdos sobre lo que hay «más allá» y que nos impide comprometernos con algo que esencialmente es bueno para nosotros. Gustará por igual a hombres y a mujeres.
Calificación: Muy Bueno
Lo Mejor: Los Personajes, las situaciones, los diálogos, las referencias musicales, las dudas, el argumento… no sabría quedarme con una sola cosa.
Lo Peor: No entender alguna de las referencias hace que te pierdas el chiste, en los nacidos más allá del año en que se escribió la novela es normal que esto ocurra y es una lástima porque te pierdes el 80% de los diálogos de la tienda (que no son todos ni los esenciales del libro).
Lo Releería: Es uno de esos libros especiales que para mi significa algo, lo he releído varias veces y todas ellas me he reído.
Lo Recomiendo: Por supuesto, más para los nacidos antes de 1990 o para los que sepan mucho de música pop de esa época, probablemente pillen los chistes sobre Génesis jeje
– Todas las chicas besan con los ojos cerrados – Enric Pardo – El autor que para mi gusto consigue más aproximarse e incluso modernizar este clásico, quizá no tenga la calidad de Hornby o la capacidad de hacer reír y llorar a la vez, pero se adapta mucho a la cultura ochentera española, merece la pena
Bonustrack
La escena eliminada de la que hablo en la reseña, lástima que esté en inglés
Fueron el curiosísimo título de esta novela junto con la sinopsis que leí en la contraportada los que me llevaron a hacerme con este libro. Es un relato bonito, reconozco que me ha gustado…pero la verdad es que no tiene nada que ver con lo que me esperaba.
No conocía a esta escritora inglesa, que por lo que he visto es la autora de otra obra de cierto éxito titulada Mi hermana vive sobre la repisa de la chimenea. Yo no la he leído, pero en general los blogeros españoles hablan estupendamente de ella, así que estará entre mis próximas lecturas.
Esta novela nos cuenta la historia de Zoe, una chica inglesa de quince años que oculta un terrible secreto. Llena de angustia pero también con una buena dosis de humor, Zoe comenzará a escribir cartas a un criminal llamado Stuart Harris, encerrado en el corredor de la muerte de una prisión de Texas. Piensa que solo alguien así, marcado al igual que ella por el secreto, la mentira y el asesinato, va a poder comprenderla…Bolígrafo en mano, Zoe respira profundamente, come un sándwich de mermelada de fresa y comienza su relato de amor y traición.
Con esta sinopsis, me había hecho una composición de lugar algo diferente. Pero al final, el hecho de que Zoe le escriba cartas a un condenado a muerte es lo de menos. Si en vez de esto la niña las hubiera dirigido a su diario, el argumento no hubiera cambiado un ápice. Con lo cuál, creo que Pitcher por un lado lo hace bien, porque logra crear una atmósfera de partida interesante que engancha a varios tipos de lectores (entre ellos, yo). Pero por otro lo hace mal, porque arrastra a los lectores a leer algo que no responde después a sus expectativas. Aunque en mi caso, repito, la conclusión ha sido positiva.
Se trata de una novela más juvenil que otra cosa, que narra las peripecias de una adolescente en primera persona y que se relacionan especialmente con su vida familiar y sus primeros amores. Zoe descarga todas sus frustraciones, problemas y pensamientos en las cartas que le escribe a Stuart, el condenado a muerte. Pero no se trata sólo de historias de instituto, sino que Zoe también guarda un secreto oscuro. Ella misma afirma haber cometido un asesinato y página a página nos enteraremos de la triste historia de Zoe y del triángulo amoroso que forma con 2 chicos.
El estilo de Pitcher es pulcro, con cierto toque negro pero no exento de humor, siendo el resultado sin duda un libro muy divertido. Mezcla perfectamente la inocencia propia de la adolescencia con temas más adultos, como la violencia del asesinato. En general, el tono de la novela es irónico y rebosa mil y un ocurrencias divertidas de nuestra protagonista.
De entre estos temas adultos, podemos destacar en primera instancia los problemas familiares más actuales como son las peleas conyugales, el paro, la responsabilidad paternal vs. el excesivo control de los hijos o la minusvalía de algún familiar. Todos ellos descritos con solvencia por nuestra autora.
El otro tema adulto y que la autora critica abiertamente es, por supuesto, la pena de muerte. Aunque es cierto que la seriedad del asunto se ve diluida entre las peripecias de Zoe y sus problemas amorosos.
¿Qué he echado de menos? Sobre todo, algo del otro lado de la interlocución. La historia de Zoe es fascinante y te lo pasas francamente bien con ella, pero también te apetecería conocer algo más del asesino encarcelado de esta historia. Vamos conociendo poco a poco algún matiz de la vida de Stuart, pero este apartado se queda muy cojo en favor de la vida de Zoe. Prácticamente toda la novela se basa en las cartas que escribe Zoe y yo reconozco que eché en falta alguna escrita por Stuart.
Por otro lado no deja de ser una novela juvenil y la autora no arriesga demasiado en el desenlace, que se queda un poco tibio para mi gusto. Además, es altamente previsible la historia de Zoe y el lector se imagina desde muy al principio cuál es el crimen tan horrible que ha cometido la chiquilla.
Pero bueno, quitando lo anterior, la verdad es que esta novela no está nada mal. Se lee con gusto, no es nada densa (no llega a las 300 páginas) y a pesar de basarse en el estilo epistolar (que puede hacerse pesado si el autor no lo enfoca bien) logra enganchar al lector con facilidad y rematar la historia con suficiencia. Un libro bonito, que no te cambiará la vida pero que te hará pasar un rato agradable y ciertamente nostálgico.
Por qué decidí leerlo: Como os comentaba, me llamaron su título y sinopsis, aunque el libro resultó ser muy distinto de lo que esperaba.
Lo mejor: El estilo de Pitcher, derrocha originalidad, ironía y buen humor. Su bonito argumento, que es capaz de enganchar a cualquier tipo de lector aunque haya dejado muy atrás la adolescencia. Algunos personajes adorables como la hermana menor con minusvalía.
Lo peor: Se queda un poco corto, le falta profundidad. La mezcla de humor con este tipo de temas más escabrorosos a veces le resta seriedad al conjunto.
¿Volvería a leerlo?: Sí, me ha parecido un relato encantador.
¿Lo recomendaría?: También, es suficientemente original y bonito como para que interese a un espectro muy amplio de lectores. A jóvenes y adolescentes les gustará sobremanera.
Tecnoscuridad – Tiempo de oscuridad – Andrei Levistski & Aleksei Bobl
Andrei y Aleksei son un equipo desde que Aleksei dejó el ejército ruso y Andrei, nativo de Chernobil le conoció para juntos escribir una de las novelas de la saga Stalker: Los guerreros de la Zona. Para escribir estas novelas tuvieron que volver a la devastada ciudad de Chernobil y juntos se convirtieron en los dos autores más populares de la serie de novelas. En 2009 decidieron abandonar esta serie para crear una nueva, Tekhnotma o Tecnoscuridad en su traducción. Las dos primeras novelas de esta serie se han traducido al Alemán, al Italiano y al Español, cosa de la que me alegro porque tenemos una traducción mucho más fiel que cuando pasa primero por la versión inglesa.
Vamos al lío. Yegor Razin es un mercenario ucraniano que está participando en un golpe de estado volando sobre la ciudad de Kiev. Derribado y acorralado por el ejercito leal, el mercenario termina siendo encarcelado. Allí en vez de un pelotón de fusilamiento encuentra una extraña oferta: un misterioso Doctor le ofrece participar en un experimento debido a que considera que el mercenario es «especial». Razin no tiene alternativa que aceptar pero no desea sino escapar. Durante el experimento algo sale mal y Yegor termina en un lugar extraño rodeado de animales mutantes, es como si fuera el laboratorio pero hubieran pasado décadas desde que se produjo el experimento.
Al salir del laboratorio encuentra un panorama desolado y un extraño vehículo atacado por unos motoristas. Yegor sin querer se ve involucrado en la pelea y termina interviniendo en favor de la desamparada Yuna Galo que resulta ser una persona importante en este mundo. Así es como el mercenario y Yuna y poco después el astuto Chuck forman un grupo. Al principio uno desconfiado y traicionero pero poco a poco forman un grupo de aventureros de verdad con sus diferentes objetivos: Chuck desea enriquecerse, Yegor intenta descubrir qué ha pasado y dónde se encuentra y Yuna desea salvar la ciudad de Arzamas de la misteriosa enfermedad llamada «La Necrosis».
Juntos irán desentrañando en misterio que esconde la alianza de la Orden con la corporación Mecacorp y la ciudad de Arzamas y todos los extraños que intentan detenerlos, desde los monjes de Kiev hasta los llamados Reyes del Petróleo, todos con sus propios planes y con siniestras intenciones para con el grupo de aventureros.
La verdad es que lo primero que me ha llamado la atención sobre este libro es la extraña mezcla de géneros. Vamos parece un cruce de las aventuras de John Carter en Barsoom inciada con «Una Princesa de Marte» (Edgar Rice Burroughs) con las modernas novelas de Dimitry Glukhovsky (Metro 2033) y con el clásico del cine Mad Max. Recuerda a la ambientación de videojuegos con Stalker o Borderlands o Fallout pero sin el punto de locura.
Estos autores se lo toman en serio pero sin el punto trágico de Glukhovsky, es decir, es un libro de aventuras, con un héroe muy duro que aparentemente «pasa» de todo el mundo pero que luego es capaz de comprometerse y de defender al inocente por el simple hecho de hacer justicia. Yegor es un Conan el bárbaro postapocalíptico, mitad antihéroe mitad caballero andante.
Los personajes son bastante tópicos, no hay sorpresas, un guerrero un ladrón y una especie de mago que van juntos en un viaje basado en un encuentro fortuito. No es nada nuevo pero la ambientación y el misterio va compensando esa parte.
El mundo está muy bien ambientado y además destacan todos los misterios que van surgiendo y que solo se resuelven en parte. Los misteriosos voladores, las plataformas del cielo, los monjes, la gran «Muerte», los mutantes, los mutáfagos, la necrosis… vamos que hay muchas cosas que quedan pendientes y que se nota que los autores van a ir resolviendo poco a poco sin dejarnos tan en la oscuridad incluso aunque sea una saga.
También hay que destacar las escenas de acción, muy bien trazadas y trabajadas sobre todo bien descritas. Se nota lo del ex militar pilotando las escenas de acción, le añade toques realistas y verosímiles incluso en un mundo fantástico y postapocalíptico como el que describen en el libro.
El final es mejor de lo que esperaba, resuelven algunas cosas aunque es un poco anticlimático por lo rápido que termina el epílogo, pero está bien construido y resuelve unas cuantas cosas con lo que se retoma un tanto el interés.
En fin, un libro muy entretenido pese a que sea poco original, destaca como libro de aventuras con una ambientación de lo más trabajada. Me ha gustado pese a que reconozco que es poco profundo y con personajes arquetípicos. Los misterios que van planteando aseguran que nos enganchemos a la segunda parte y sin embargo resuelven lo suficiente como para que no nos quedemos a oscuras.
Calificación: Bueno
Lo Mejor: La ambientación, la acción, se nota que hay un ex-militar dirigiendo el libro
Lo Peor: Es poco profundo y los personajes son un tanto tópicos
Lo Releería: Puede, es muy entretenido
Lo Recomiendo: Para adolescentes y gente que quiera leer un libro de aventuras de los de antes, tipo conan con una estupenda ambientación tipo Fallout
Séptima entrega de la saga de novelas policíacas de Camilla Läckberg, todas ellas ambientadas en la ciudad sueca de Fjällbacka. Y todas ellas protagonizadas por el inspector de policía Patrik y la escritora Erika. Como ya he comentado en anteriores reseñas, las diferentes novelas de la serie tienen una estructura muy similar, igual ambientación y protagonistas principales, así como mismo estilo y género. Aunque siguen un orden cronológico y cada novela empieza justo cuando acaba la anterior, pueden leerse de forma independiente y alterna. Siempre entenderás mejor los entresijos familiares y personales de los personajes si sigues el orden de publicación, pero los casos de asesinato son diferentes en cada libro y tienen un principio y fin. Así que no necesitas leerte todos los volúmenes anteriores para entender uno cualquiera que leas de forma separada.
La anterior novela, La sombra de la sirena, acaba de una forma un tanto abrupta. No voy a revelar lo que pasa, pero desde que lees la contraportada te enteras que tanto Patrik como Erika están vivitos y coleando, así que como suponíamos al terminar el anterior, Camila se echó un órdago que no se atrevió a rematar.
Sinopsis
Patrik acaba de reincorporarse al trabajo tras una baja por enfermedad y Erica se dedica de lleno a sus gemelos, que nacieron prematuros. Apenas tiene tiempo para ir a visitar a Annie, una compañera de instituto que acaba de regresar a Fjällbacka después de muchos años. Junto con su hijo Sam, Annie se ha instalado en el faro abandonado de la isla de Gråskär, propiedad de su familia. A pesar de los rumores que circulan por el pueblo sobre la leyenda de la «isla de los espíritus», en la que los muertos vagan libremente, no parecen importarle las voces extrañas que oye por la noche. Además, su antiguo novio Matte Sverin, quien también ha pasado unos años en Estocolmo y acaba de empezar a trabajar en el Ayuntamiento de Fjällbacka, aparece asesinado. Siendo Annie la última persona en verle con vida.
Estos sucesos le depararán a Patrik y a su equipo muchos quebraderos de cabeza y por supuesto Erica realizará su propia investigación en paralelo para conseguir atar algunos cabos sueltos.
Opinión personal
Nada nuevo bajo el sol. Esta novela es igual a las anteriores en todos los aspectos que se os ocurran. Sigue manteniendo su triple estructura habitual. Por un lado, la investigación policial del asesinato a cargo de Patrik y su equipo, en modo oficial y por Erika, de forma extraoficial. Por otro, las relaciones personales y familiares de nuestros personajes principales, incluyendo al jefe de policía Mellberg y su familia, así como a la hermana de Erika y la suya. Por último, una historia no relacionada directamente con el crimen y ambientada a finales del S.XIX principios del S.XX.
Por darle un poco de originalidad a la reseña y no repetirme demasiado en esta saga, voy a hablar de este volumen comparándo con sus 6 predecesores.
Lo mejor de este libro: que es muy, muy, muy, muy, muy entretenido. Si lo comparamos con los restantes, yo diría que está entre los más amenos. No sé si es que ya conocemos a los personajes y la zona de memoria y por tanto cuesta muy poco entrar en harina. O que esta estructura siempre igual en las novelas facilita también la lectura. O el estilo de Camilla, directo, sencillo y siempre jugando con la posible identidad del asesino. No sé qué será, pero yo me lo he pasado estupendamente leyendo esta historia. Y me han durado sus 450 páginas 3 sentadas exactas.
Con esto no quiero decir que este libro sea el mejor de la serie, para mí tal privilegio sigue teniéndolo el quinto, Las huellas imborrables. Pero desde luego esta entrega está entre las buenas.
También me gustó mucho: La historia del siglo pasado. Sobre todo porque introduce algo atípico en esta autora y que es el matiz paranormal. Al final, este relato no deja de ser una historia de fantasmas de toda la vida. Y a mí me chiflan las historias de fantasmas.
Lo peor de este libro: que es muy, muy, muy, muy, muy predecible. Nunca he sido la más rápida de la clase descubriendo al asesino en las novelas policíacas (aunque reconozco que últimamente estoy más ágil. Debe de ser por leer tanto). Pero en este caso, me resultó sencillísimo saber quién era el asesino, desde muy al principio además. Se nota que hay algo raro en torno al mismo y sabes perfectamente qué es. Me ha parecido el libro más predecible de toda la serie, por el momento. Abro un spoiler:
Me pareció clarísimo que Sam estaba muerto y que Annie lo había matado accidentalmente tras asesinar a su marido. Principalmente porque el niño de 5 años no interaccionaba con su madre (sólo dormía y estaba callado), no era visto por ningún otro personaje excepto por Annie y con los únicos con los que hablaba era con los fantasmas muertos de la isla. Blanco y en botella…
/****************** FIN SPOILER ******************/
Tampoco me gustó demasiado: Toda la trama relacionada con el balneario y el SPA. Me aburrió. Me aburrió más de lo que me aportó a la historia en su conjunto.
Ya para finalizar, comentar que el tema principal de este libro y que se refleja en varias de las subtramas argumentales es el maltrato contra la mujer. Tema que no es una novedad en la escritora y que ya había reflejado anteriormente a partir del personaje de Anna y su marido maltratador.
En resumen, me parece una novela ideal para la época estival que se acerca. Probablemente no sea alta literatura, posiblemente resuelvas sin problema el asesinato. Pero sin duda te amenizará las tardes en la playa y la piscina. Y opino que con el calor, este tipo de libros que exigen poca atención son perfectos. Y si además te gusta el género políaco…¡Ni te lo pienses!
Por qué decidí leerlo: No soy una fan acérrima de la sueca. Pero reconozco que una novela suya de vez en cuando supone entretenimiento asegurado. Así que tardé poco en hacerme con esta recién publicada.
Lo mejor: Ver el apartado Lo mejor de este libro.
Lo peor: Ver el apartado Lo peor de este libro.
¿Volvería a leerlo?: Teniendo en cuenta lo prolífica que es esta mujer y que ya tiene más volúmenes escritos con la misma ambientación…no. Leeré los siguientes.
¿Lo recomendaría?: Sí, si te gusta la sueca, la novela policíaca blandita o te apetece leer algo que enganche rápido y con lo que pasarás un rato muy ameno.
Brújulas que buscan sonrisas perdidas – Albert Espinosa
No es un secreto que Albert Espinosa se cuenta entre mis escritores preferidos así que en cualquiera de sus novelas, especialmente en la primera que leí «Si tu me dices ven lo dejo todo… pero dime ven» podréis encontrar largas notas sobre su biografía, sobre como sufrió un cáncer que le hizo perder una pierna y ganar en ganas de vivir y sobre cómo le dieron el alta con 24 años tras pasar 10 años de hospital en hospital. Desde luego es un autor que no deja indiferente.
Pero vamos al lío. Erkaiz tiene el penoso deber de volver a la casa de su familia tras muchos años de ausencia. Lo cierto es que se ve forzado a ello porque la enfermera que cuida de su padre debe irse por motivos familiares. Él es consciente de que su padre, un famoso director de cine, es una persona a la que odia y con la que lamentó pasar su infancia, y sin embargo él le necesita. Aquejado de un cáncer terminal y con el Alzheimer amenazando con hacerle desaparecer por completo, su padre requiere de él algo más que cuidados.
Él es consciente de repente de las similitudes que le unen a ambos. Su madre falleció dejando a su padre el deber de gobernar a 4 hermanos y él mismo ha perdido a su esposa en una accidente de tráfico dejándole a cargo de sus dos gemelas. Al margen de este punto cree que no tiene nada que ver con ese hombre distante y severo que nunca les dejaba hacer ruido en casa porque molestaban a su madre enferma.
Su primera conversación con su padre que aparentemente no le reconoce, está orientada a una entrevista de trabajo para ser su ayudante de producción en una nueva película que el famoso director desea filmar. Así de forma inocente Erkaiz acepta el «trabajo» y sigue el juego de su Padre con ayuda de Voy, el viejo ayudante de dirección de su padre.
Pronto Erkaiz se da cuenta de que aquello no es solo una película sino que es una forma de ir cerrando el abismo que años atrás le separó a él de sus hermanos y de su padre a raíz de la muerte de su madre. Es hora de ir conociendo los secretos y de ir encontrando la fuerza para perdonar a aquellos que se equivocaron.
Tengo que reconocer que cuando tuve este libro entre las manos me pregunté si Albert había conseguido superar «Si tu me dices ven». Bueno, eso es una opinión que también tendréis que dar vosotros pero la mía es que este libro, pese a que no es un libro malo y es mejor para mi gusto que «Todo lo que podríamos haber sido tú y yo» no llega a superar al superventas del autor. Las razones, pues ahora os las voy contando.
Primero aclarar que a la hora de hacer una reseña, esta es subjetiva y engloba todo lo que implica la experiencia de leer el libro. Puede que haya algunos críticos que hablen de la poca riqueza de vocabulario del libro o del abuso de los puntos suspensivos a lo largo del texto, yo prefiero centrarme en lo que me ha hecho sentir la prosa cuasi-poética de Albert Espinosa. No son libros enfocados al intelecto sino sobre todo a los sentimientos y es por la empatía respecto a los sentimientos del personaje por lo que estos libros gustan. Puede que no se convierta en un clásico pero creo que en esta época es menester que haya más libros orientados al corazón que a la cabeza.
Terminado el «disclaimer» para todos aquellos que van a vociferar diciendo que es «literatura basura tipo Coelho», os diré que esta novela sigue el tono de las otras del autor. Es una novela corta, casi un relato largo. Destaca el uso del «realismo mágico» a lo largo de toda la novela, donde suceden algunas cosas extraordinarias sin que el personaje perciba nada extraño y las acepte con total naturalidad, un ejemplo es la brújula, regalo de su madre, que apunta hacia su puño cerrado (que es donde se guardan las sonrisas perdidas).
El libro tiene algunos altibajos y por momentos resulta algo confuso, quizá es lo que más puntos le ha restado en mi valoración, que hubo momentos en que tuve que volver atrás porque literalmente no me enteraba de lo que pasaba porque en ocasiones hay demasiadas tramas y demasiados personajes a la vez en escena, aunque al final terminas teniendo una visión aceptable de la infancia del personaje y de su presente.
Me gusta (a la vez que me irrita, cordialmente jeje) como el autor «juega» con el lector y con su realismo mágico. El ejemplo más claro es cuando recibimos mensajes contradictorios. Un personaje parece que ha muerto por una serie de datos que da el autor y sin embargo el personaje interactúa con y habla del personaje en presente. Entonces surge la duda, ¿esta muerto y es un síntoma del realismo mágico del autor o hay otra explicación? Bueno pues con ese tema juega bastante el libro entre lo «mágico» y lo «lógico», que ya hizo en su anterior novela y que parece que no desagradó al público.
Creo que deja bonitas frases y personajes entrañables, siendo mi favorito un viejo conserje de un hotel que se dedica a dejar notas con algo de «sabiduría» en las almohadas de los huéspedes. Te resultan tiernos y te gustaría conocerlos, es uno de los mayores logros del autor.
Luego hay algún cabo suelto o medio suelto en el argumento, especialmente respecto a un viejo conflicto con sus hermanos respecto a unos anillos de su madre. Esa es quizá la trama argumental de las varias que trata que menos me gustó.
Es un libro en el que el tema central es superar la pérdida de alguien y cómo la pérdida te cambia y cómo hay que sacar fuerzas para volver a empezar. Habla de los secretos que separan a las familias y lo duro que resulta perdonarse y volver a empezar. Sobre todo es un libro sobre volver a empezar.
En general le doy una puntuación de «Bueno» porque me entretuvo, me hizo pensar, me hizo sentir (esto sobre todo) y terminé el libro con sensación de que debería cambiar alguna cosa de mi vida. Creo que tiene grandes personajes y que también tiene tramas de lo más entretenidas pese a ser bastante más triste que el anterior libro.
Calificación: Bueno
Lo Mejor: Para mi el conserje del hotel y quizá el final del libro
Lo Peor: Confuso a veces, la trama de los anillos no me gustó
Lo Releería: Creo que si, en un momento más adecuado
Lo Recomiendo: Si, si te gusta el autor o si te gustan autores similares con Coelho es probable que te guste, eso si es un libro un poco triste y no se lo regalaría a cualquiera.
«La gente es tan falsa… Desde hacía un año no creía a nadie. Paso algo y todos me dieron la espalda… No quiero decir que no estuvieron a mi lado, ahí estuvieron los primeros días, pero después desaparecieron…»
«Jamás nos mentiremos… Escúchame bien, eso implica algo más que ser sincero… En este mundo mucha gente es falsa… Las mentiras te rodean… Saber que existe un archipiélago de personas que siempre te dirán la verdad vale mucho… Quiero que formes parte de mi archipiélago de sinceridad»
«Las abolladuras dan vida… ahora es vida compartida en una misma noche»
«Quizá ese es el sentido de la vida, todos somos ignorantes que ignoramos cosas diferentes hasta que desaparecemos… El conocer la verdad nos permite marchar»
«Que si el cuerpo come cosas que no son sanas y las convierte en velocidad y en energía… El alma puede llegar a hacer lo mismo con las malas experiencias del corazón. Que de todo se puede aprender…» (Ojo que aparece en el libro pero como aclara el autor es una frase de «De Profundis» de Oscar Wilde